Componentes básicos de un sistema de osmosis inversa

La ósmosis inversa es una de las tecnologías más eficaces para purificar el agua en el hogar. Aunque desde fuera solo veas un grifo elegante y agua pura saliendo directamente del fregadero, dentro del equipo de Miia hay un sistema perfectamente diseñado para eliminar impurezas y garantizar agua saludable cada día.
A continuación, te explicamos los componentes clave de un sistema de ósmosis inversa como el de Miia:
Filtro CP (Carbón y Sedimentos)
Este filtro combina carbón activo de alta calidad y filtración de sedimentos de hasta 5 micras. Su función es eliminar cloro, olores, sabores no deseados y partículas suspendidas, protegiendo así los componentes posteriores del sistema.
Membrana RO (Ósmosis Inversa)
El corazón del sistema. Esta membrana semipermeable de 800 GPD elimina eficazmente sustancias orgánicas de moléculas pequeñas, bacterias, virus, microplásticos y otros contaminantes disueltos en el agua.
Filtro TC (Remineralizador)
Después de la purificación, el filtro TC remineraliza el agua, devolviéndole minerales esenciales como calcio y magnesio en la proporción adecuada. Esto mejora el sabor y aporta beneficios para la salud, ofreciendo un agua equilibrada y de alta calidad.
Grifo con pantalla inteligente
Miia incluye un grifo exclusivo con pantalla que indica el estado del sistema y la calidad del agua, proporcionando una experiencia de uso intuitiva y moderna.
Diseño compacto sin depósito
El sistema de Miia es compacto y no requiere un depósito de almacenamiento, lo que permite una instalación sencilla y un flujo de agua rápido directamente desde el grifo.
Con Miia, obtienes un sistema de purificación y mineralización avanzado, sin límite de agua para tu hogar, y con la tranquilidad de contar con instalación gratuita y mantenimiento incluido. Disfruta de agua purificada y mineralizada libre de contaminantes para proteger tu bienestar y el de tu familia.
¿Qué elementos participan en la ósmosis?
En un proceso de ósmosis, participan principalmente tres elementos clave que permiten el movimiento natural del agua entre dos soluciones con diferentes concentraciones:
Solvente (normalmente agua)
Es el líquido que se mueve a través de la membrana semipermeable. En la mayoría de los casos, el solvente es agua, que tiende a desplazarse desde la solución menos concentrada hacia la más concentrada para equilibrar ambas.
Soluto
Son las sustancias disueltas en el agua (como sales, minerales, azúcares, etc.). En la ósmosis, el soluto no atraviesa la membrana, solo el agua lo hace. Cuanta más concentración de soluto hay en un lado, mayor es la presión osmótica.
Membrana semipermeable
Es una barrera selectiva que solo permite el paso del solvente (agua), pero no de los solutos. Esta membrana es fundamental en el proceso, ya que separa dos soluciones de distinta concentración y regula el flujo de agua entre ellas.
¿Y en la ósmosis inversa?
En la ósmosis inversa, se aplican los mismos elementos, pero con una diferencia clave: se ejerce presión externa para forzar al agua a moverse en sentido contrario al natural, es decir, desde la solución más concentrada hacia la menos concentrada. Así se consigue separar el agua pura de los contaminantes, quedando el soluto retenido por la membrana.
Estos tres elementos son la base tanto del proceso biológico natural como del sistema avanzado de purificación que utiliza la ósmosis inversa, como el que emplea Miia para ofrecerte agua verdaderamente limpia y segura.